Las presiones de los márgenes, las adquisiciones del consultorio y los volúmenes inestables de pacientes son solo tres de las amenazas importantes a las que se enfrentan los consultorios médicos en la actualidad. La encuesta de finanzas y operaciones del grupo médico del 2019 de AMGA informó que, aunque la rentabilidad está mejorando, todavía hay margen para el crecimiento. En promedio, los sistemas de salud se enfrentaron a una pérdida de USD 201.042 por médico en el 2018, lo que representó un descenso de los USD 243.918 en el 2017. Los consultorios independientes mejoraron marginalmente sus beneficios por médico, logrando USD 2510 en el 2018, en comparación con USD 2396 en el 2017.
A pesar de los resultados positivos de la encuesta, las condiciones del mercado de la atención médica siguen siendo inciertas; por lo tanto, no se garantiza una mejora continua de la rentabilidad. Una de las tendencias clave que influirán en la rentabilidad es el cambio demográfico. Pew informa que para el 2029, más del 20 % de la población tendrá 65 años o más. A medida que la generación del baby boom envejezca, una proporción cada vez mayor de la población estará cubierta por Medicare, y sus tasas de reembolso serán las que establezca el gobierno. Un análisis de la Oficina de presupuestos del Congreso encontró que las tasas de pago de los pagadores privados eran, en promedio, un 89 % más altas que las tasas de pago de Medicare.
Otra tendencia clave que afectará a la rentabilidad es el aumento del consumismo en la atención médica. Kaiser Family Foundation informa que la familia típica no anciana gasta USD 8200 (el equivalente al 11 % de sus ingresos) en gastos de atención médica. En una familia de cuatro miembros, si la salud de aunque sea un solo miembro disminuye, la porción de los ingresos que se gastan en atención médica se eleva al 15 %. A medida que la carga financiera sigue pasándose al paciente, los pacientes están exigiendo transparencia en los precios y están buscando las opciones de atención más económicas. Como resultado, el costo y la conveniencia se han convertido en prioridades principales.
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